Confieso mi ignorancia en muchos aspectos de la botánica, ya que sólo soy un jardinero aficionado. Para mi los escaramujos siempre han sido el fruto de la rosa, aquello que quedaba cuando la rosa había terminado de florecer.
Dentro de esa especie de fruto, están las semillas. Parece ser, que el escaramujo no es en realidad el fruto del rosal, sólo es el contenedor del verdadero fruto, que es el aquenio (las semillas). Los escaramujos, conocidos por otros nombres como tapaculos, gavanzo o garamito, son comestibles, pudiéndose consumir sin realizar ninguna elaboración, aunque lo más habitual es encontrarlos formando parte de mermeladas o postres.
Volviendo sobre mi ignorancia sobre la botánica, he podido leer en un blog de cierta importancia, que el escaramujo es el nombre común de un grupo de plantas cuyo ejemplo paradigmático es la Rosa Canina.
Yo pensaba sinceramente que
Utilidades de los escaramujos
Hablar hoy de los escaramujos no es casual. Estamos a finales de verano, quizás no por el calendario, y tal vez tampoco por el calor, que se empeña en recordarnos que quizás estemos asistiendo a un cambio climático, siendo julio de 2015 el más caluroso que se ha conocido en el mundo…pero las rosas ya no florecen con profusión, y las rosas silvestres nos dejan sus frutos que ya están coloreando, momento adecuado para su recolección. Por cierto, las fotos son de escaramujos de rosa canina, o rosal silvestre.
En España no tenemos una gran cultura del uso de los escaramujos, aunque en algunas tiendas «gourmet» podemos encontrar mermelada de escaramujos…tiene gracia que se vendan en estos establecimientos, cuando el producto es de lo más humilde, pudiendo recogerlo a la vera de cualquier camino.
Yo creo que el chiste, estriba en que no es habitual verla en las estanterías de la tienda del barrio y resulta bastante «original».
Los escaramujos se pueden consumir frescos. Nunca me había dado por hacerlo, y desde hace tiempo la idea de los escaramujos como alimento me rondaba un poco por la cabeza.
Si los acercas a la nariz, tienen un olor un poco dulzón, pero al intentar comerlos, las semillas (durísimas) que tienen en el interior no me han gustado. Tal vez los he recogido cuando ya estaban demasiado secos. Sabor….poco.
Es curioso, porque en algunas ocasiones si he probado los escaramujos en infusiones, pero siempre vienen mezclados con otras hierbas y no sabría reconocer el sabor exacto.
Ya he dicho otra forma de consumo…infusiones. Parece que su consumo en infusión, ayuda a mejorar el riego sanguíneo y ayuda a tener una piel tersa.
Te aseguro que nunca los he consumido con esa intención, sólo es que soy un «infusión-adicto». Ahora estoy enganchado a unas infusiones de frutas del bosque..están geniales.
El consumo más fuerte, y el destino más habitual de los escaramujos, al menos en nuestro país, está en la confección de mermeladas y postres.
Propiedades de los escaramujos
Su contenido en vitamina C es una de sus particularidades más sobresalientes, ganando por 20 veces a las naranjas y limones, nuestra fuente habitual de esta vitamina.
Está claro que una de sus propiedades más sobresalientes, con esta cantidad de vitamina C, es reforzar el sistema inmunitario y prevenir los catarros.
Otra forma curativa y preventiva del uso de escaramujos, se centra en curar las inflamaciones del riñón y prevenir la formación de piedras o cálculos.
Otra utilidad, y que enlaza con las propiedades para la piel que he mencionado antes, está en su uso cosmético, ya que con los escaramujos se produce aceite de rosa mosqueta, utilizado en el cuidado de la piel.
Si decides hacer alguna prueba cosmética o dietética, no utilices los rosales de tu jardín. Solemos utilizar productos químicos, para tratar las múltiples enfermedades de los rosales, como comprenderás los escaramujos del jardín no son los más adecuados para consumirlos con tranquilidad.
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Yo los conocía en infusiones, desconocía lo de las mermeladas.
También me encantan las infusiones, y una muy agradable es la de tomillo