Estamos en verano, y si pudiéramos poner sinónimos al verano, con las actividades que realizamos, serían: playa, piscina, refrescos, helados, amigos, y… la típica barbacoa.
No se entiende un verano sin una barbacoa en el jardín, en el tuyo o en de algún amigo que tenga la bondad de invitarte.
A mi me gustan las barbacoas, y todos los años realizo alguna en el jardín, no muchas por que hay mucho trabajo detrás, ya que hay que comprar el churrasco, la panceta, los choricitos, preparar el jardín, colocar las mesas, etc. Y luego el trabajo de recogerlo todo, ya que los amigos cuando terminas… a las mil, se van a casa y tu a la cama. Lógicamente al día siguiente te toca el trabajo más ingrato, recoger todo y limpiar el jardín.
A pesar de que hay mucho trabajo para preparar la típica barbacoa, no hay nada como la carne a la brasa, por supuesto regada por un buen tinto de verano y en compañía de los amigos y la familia.
Yo creo que la barbacoa es una escusa para reunirse y comer, algo que nos encanta a todos los españoles, reunirnos en torno de una buena mesa y con buena compañía.
Pero el que nos guste la típica barbacoa de siempre, no quiere decir que no podamos innovar y añadir algún elemento distinto, para que nuestra barbacoa sea inolvidable, y no me refiero a comprar sardinas… ¿A alguien le gustan las sardinas de la barbacoa? Prefiero la carne, y también la verdura… unos pimientos o unas berenjenas a la parrilla están geniales. Te recomiendo que los pruebes.
Por qué no una parrillada diferente con salchichas de Frankfurt
¿Has visto alguna vez la típica barbacoa americana? Si, la que sale en las miles de películas de gángsters, o policías americanos, parece que son los únicos que saben hacer barbacoas. Lo que te decía, ellos ponen en la barbacoa siempre, siempre, hamburguesas y salchichas de Frankfurt.
Y digo yo, ¿Por qué no poner salchichas morunas? Sería como la perfecta unión entre nuestro pincho moruno, y la salchicha de Frankfurt, ¿No? y a los que os preguntáis si existen la respuesta es ¡Si!.
Y es que los perritos calientes americanos están muy buenos, pero ¿A la barbacoa? No lo se, no los he probado nunca, tal vez este verano sea la ocasión perfecta de probarlos la próxima barbacoa…
A mi los
Pero algunos cocineros de barbacoa, cocineros de fin de semana, no admiten que les digan que están en un error, y lo mejor es comerse la carne carbonizada y tomarse unos buenos vinos con casera o lo que toque, y nada a disfrutar.
Disfrutar con los amigos alrededor del fuego
Este fin de semana he tenido barbacoa en casa, y no es broma. Lamento no haber hecho unas fotitos, para acompañar a este artículo.
A la barbacoa asistieron algunos amigos y por su puesto la familia. Comiendo en familia una barbacoa, es la mejor forma de rematar un fin de semana… un menú informal, una cervecita fresca y todo parece que se detiene, cualquier problema, incluso la llegada del lunes carece de importancia, al menos durante esos momentos.
En España necesitamos pocas excusas para quedar y hacer una barbacoa, o una cena informal, lo que haga falta: cumpleaños, aniversarios, que empieza la temporada de futbol, que empiezan las vacaciones y no nos vemos en unas semanas, que inauguro la piscina nueva, etc.
Además tenemos la sana costumbre de alargar las cenas hasta lo indecible. A mi me gusta que las barbacoas en el jardín sean cenas, la caída de la tarde, cuando el calor no es tan fuerte, permite disfrutar el jardín en todo su esplendor, aunque los colores se difuminen un poco, tenemos la ventaja que muchas de las plantas (rosas, don diegos…) es al atardecer cuando dejan escapar su perfumen en el jardín, creando un ambiente precioso.
Si además adornamos la mesa con algunas velas (si caben), y con la luz indirecta del jardín, que llega desde el suelo, el ambiente no puede ser más perfecto para charlar y compartir con los amigos.
Y la cervecita fresquita, da lo mismo de la marca que sea, lo único importante es la temperatura. Luego llega la conversación, por que detrás de una cervecita y un bocado, otra cervecita y otro bocado, y hablar y hablar de nuestras cosas hasta que el cuerpo aguante.
¿Qué te parecen las barbacoas que organizo en el jardín? A todos mis amigos les gustan, sobre todo porque soy yo el que habitualmente las organizo y claro… el trabajo de montar y desmotar es el mío, todos encantados.
Aunque lo importante es el ambiente que se crea, los niños, los abuelos, los bisas, los tíos, los amigos…todos disfrutando de la barbacoa, la excusa para unirnos en torno a la mesa y disfrutar de una noche de verano muy agradable.
Bocadillos de salchichas con mucha salsa
La barbacoa es una escusa perfecta para reunirnos, pero nos podríamos reunir igual fuese la comida que fuese: una paella, una caldereta, o unos bocadillos… lo que ocurre es que parece que dices: “Oye veniros el fin de semana a casa para comernos unos bocadillos” y no suena igual que si invitas a una barbacoa.
Se que lo importante no es la comida en si, podríamos disfrutar comiendo hot dogs, igual o más, que comiendo un buen trozo de panceta o morcilla del país.
No se porque les llamamos perritos calientes podríamos llamarlos bocadillos de salchichas, aunque luego les echemos “ketchup” y “mostaza”, para comulgar un poco con los americanos, aunque las salchichas tipo “Frankfurt”, ya te puedes imaginar de donde son ¿No?. Pues aunque parezcan la misma cosa, no debemos confundir las salchichas de frankfurt con los hot dogs, las primeras son un productor típicamente alemán y austrico y los perritos calientes son un producto americano, esto no quiere decir que necesariamente se fabriquen allí, podemos encontrar fabricantes nacionales como los fankfurts Casa Vallés.
Menos mal que la carne a la brasa, la barbacoa no es un invento americano…la carne a la brasa, la carne a la parrilla, viene desde nuestros ancestros, aunque hay que reconocer que las mejores barbacoas, la mejor carne a la brasa es la Argentina.
Tal vez sea por la carne de allí, no lo se, pero es que la carne Argentina, o las barbacoas argentinas, son otra historia.
Ellos si saben hacer una buena carne a la brasa, y no quemarla como mi cuñado, el que se queda a cargo de la barbacoa en casa, pero no le puedes decir que no, porque piensa que es un gran cocinero, y me sabe mal sacarle de su error.
Tal vez la próxima vez, en vez de barbacoa, ponga unos bocadillos de salchichas con mucha salsa, seguro que la carne no queda tan quemada.
¿Os gustan las barbacoas de Frankfurt?
Esto es una pregunta al aire, ya que no es muy habitual que pongamos salchichas de Frankfurt en la barbacoa, aunque nunca es tarde para empezar y hacer nuevos experimentos. Me imagino que así es como hacen los grandes cocineros, tienen una idea y experimentan.
A mi un buen bocadillo de Frankfurt si me gusta, y no el típico perrito caliente. Donde esté el pan, pan, que se quiten los bollos dulces de los perritos calientes.
Si además en el bocadillo ponemos unas salchichas con pimiento, que puede ser frito o ya que estamos con las barbacoas, unos pimientos a la parrilla…todo según el gusto de cada uno. Si has visto mis artículos sobre el huerto, ya sabrás que los pimientos verdes me pierden, es lo que más pongo en el huerto.
Volviendo a las barbacoas de Frankfurt, si decidimos poner unas salchichas Frankfurt en la barbacoa, habrá que tener un cuidado especial en lo pasarlas en exceso, ya que son salchichas cocidas y de lo que se trata es de pegarlas un golpe de calor para poderlas comer.
Las podríamos acompañar con los pimientos del bocadillo, pero antes de ponerlos en el bocadillo, claro. Unos pimientos verdes a la brasa, resultan geniales, pero ya puestos, podemos hacer una parrillada de verdura: ….pimientos verdes, rojos, berenjenas, cebolla, un tomatito, lo ideal para acompañar en una barbacoa.
Yo ya estoy preparando la próxima barbacoa, hoy me he ido a comprar el carbón vegetal ¿Y tú? ¿Te animas a hacer una barbacoa en el jardín?
Pues si te animas y quieres compartir unas fotos…pues nada, luego las colgamos en el blog.
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