Siguiendo con los post dedicados al día de la madre, hoy os propongo otro regalo ideal, sencillo y no excesivamente caro, que los tiempos no están para derrochar, un cuadro primaveral hecho por nosotros mismos, con todo el cariño que se merece una madre.

Hacer un cuadro con flores secas, paso a paso

Hace un tiempo vimos en el blog la técnica para hacer cuadros con hojas de otoño, el proceso para hacer este cuadro primaveral es el mismo, pero ahora vamos a utilizar lo que nos proporciona la primavera y la terminación a mi me gusta mucho más, por que el resultado final es como si el cuadro no estuviera hecho por nosotros, si no que acabara de salir del taller de un artesano.
Materiales:
*Flores secas.
*Un lienzo que va a ser el fondo de nuestro cuadro.
*Pintura azul turquesa (u otra dependiendo de la flor).
*Pegamento del que se usa en Decoupage.
*Barniz para el fondo.
*Un lazo del mismo tono que el color del fondo.
Para realizar el cuadro primaveral, se ha utilizado un ramo de tulipanes secos, pero podíamos haber utilizado cualquier otra flor de primavera y dependiendo del color de la flor, se podría haber elegido un fondo de color distinto para nuestro cuadro.

Lo primero que hacemos es dar el fondo de color al cuadro. En este cuadro, como el color de la flor es amarilla, los toques de color son azul turquesa, también habrían quedado bien en gris, o prolongando el color de la flor en amarillo, aunque en este caso deberíamos haber elegido un todo de amarillo distinto, bien más fuerte tirando a dorado o tal vez, más suave.

A continuación damos un fondo de barniz y dejamos secar. El siguiente paso es pegar las flores, si usamos la idea de poner un lazo, como si fuera un ramo, deberíamos poner nuestro lazo antes de pegar.

El toque final, que dará un aspecto definitivamente único y elevará el nivel de calidad del cuadro, es poner un cristal y enmarcar el cuadro primaveral. Ya tenemos el regalo perfecto para el día de la madre.
Fuente: shelterness